lunes, junio 19, 2006

bahía

en medio de la jaurìa
cuelgan
sàbanas en los techos

el amor equivocàndose de boca
labios equivocàndose
de miradas

anda por la impùdica vida fumando sin parar mi alma


no hay nadie en esta cruz
salvo
el ìcono del recuerdo meretriz
que la
puta en celo
bajo el
desconsuelo de los amantes dejò caer zambamente.


El la extraña
la desea
la viola en sueños
no hay nada mas que ver
piensa
y cierra los ojos
hamacàndose crepuscular
a su merced.

2 comentarios:

sol dijo...

El que se va sin que lo echen...

(me gustó mucho esta)

anais dijo...

Me encantó.
Un pedido... No seas egoísta... Lees tantas cosas al aire... Por qué no lees alguno de estos poemas que están muy buenos?
anais i.